Que pechá...Dios mio...no se le acaban las pilas...me tiene mareá del tó...
Haaaaaaaaaaaaaayyyyyyyyyyyyy caballa frehquita, a sinco euro er kiloooooooooooo, haaaaaaaaaaaaaayyyyyyyyyyyyyyy caballa frehquita, a sinco euro er kilooooooooo....
Tú sabes la tortura que es desde las 9 de la mañana...es la una del mediodía....y todavia le quedan caballa frehquita...
Hoy encima toca plancha...ese bicho infernal que bebe agua y lo transforma en un vapor ardiente que te quema hasta las pestañas. Con más valor que el Tato, la miro frente a frente...una cesta con ropa hasta los topes, de la cual he pasado como si no nos conocieramos, haciendome la tonta durante varios días, pero hoy me ha llamado hasta por mi nombre...no me queda otra, hoy toca plancha.
Y levantito en Cádiz. Si levanto una persiana, el bofetón que me llevaré dejará en pañales a Gilda...y encima toca plancha.
No vea de verdad el gachó de la caballa...soy capaz de bajar y comprarle toas las que le queden, pero cállate ya, por tu mare!
Que poco me importaban esas cosas hace años, ni cuenta me daba de que existian. Cuando solo pensaba en que el verano era pa ir a la playa, enamorarme, arañarle al reloj los minutos pa quedarme en mi calle charlando, darle coba a mi madre pa que me dejara volver más tarde...ojú má...que to el mundo se queda...que me voy a tener que venir sola eh?, andaaaaaaaa, venga yaaaaaaa...A veces lo conseguía, otras veces me ganaba tal bocinazo, que ya me daba igual salir, no me iba a enterar de ná.
Veranos en los que soñaba tantas cosas...veranos que tenian un olor especial, olían a los pimientos asados de mi madre, a los caracoles que, pobres, hervian en la megacacerola de la cocina de butano, a las tortillas de patatas, a la casera de naranja...a sal y a limón...Y las noches de verano olían a bajamar...Y hacía tanta calor como ahora, pero no me importaba ná...Tal vez porque la que planchaba era mi madre...
Y tambien cantaban en las esquinas los vendedores de pescaito...pero no me importaba ná.
Y los anuncios de la tele en verano...las niñas del copertone, ese negro de ojos saltones del helado negrito...los recuerdas?? El frigodedo...ven, ven...y el frigopie. Aun no era un crimen anunciar tabaco y alcohol...como me gustaban los jinetes del Marlboro!! Ay, ay, ay....dicen que cualquier tiempo pasado fué mejor...no lo creo, pero los recuerdos que te deja perviven contigo el resto de tu vida.
Soy la niña que lloraba con Candy, Candy. La que también se enamoró de Javi de Verano Azul, quien me iba a decir a mi que al cabo de los años le conocería en persona...uf, me hubiese dado un síncope. Soy la niña que se peleaba con su hermano porque me obligaba a ver Spiderman, mientras mi madre me hacia merendar un yogur de fresa Danone (los aborrecí). He tenido gargajillos rosas pa ir a la playa, y pegotes de crema Nivea en mi nariz. Me he llenado los pies de alquitrán al laito de la piedra barco y aún oigo a mi madre gritando: niñaaaaaaaaaaaaa tehquiere salí ya del agua, hiha...mirala como un garbansito toa arrugá. Jugar a la loteria hasta las tantas, matando mosquitos que te ponian la cara como una torta de Inés Rosales.
Tantos y tantos recuerdos...que han vuelto a mi cabeza por "culpa" del de la caballa frehquita.
Voy a bajar y le voy a preguntar: no te jarta???. Le voy a comprar toas las caballas pa que el hombre se vaya ya pa su casa, que no vea el lorenzo que se esta tragando, y le voy a dar las gracias, porque por unos momentos he vuelto a tener 8 años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario