Absolutamente incompetente

No tengo ningún recuerdo en el que me interesaran los fervores religiosos. Me eduqué en un colegio católico, no reniego de eso, al contrario, me sirvió para aprender mucho...tal vez demasiado. Tener creencias o fé en algo es, me atrevería a decir, algo innato en el ser humano. El miedo a estar solo, el no querer ser responsable y tener a alguien o algo a quien culpar de tu suerte o tu desgracia, el tener a quien pedir ayuda, el confiar tu destino en otras manos, el que te perdonen cuando tus actos no han sido los correctos...que no, que no...que no juzgo a nadie, que cada cual actue de la manera que se le antoje, pero ay! amigo mio, con una sola condición: no perjudicar a nadie. He ahí la cuestión y el problema. Y es del todo paradójico cuando se trata de lo que se trata. Cuestionar religiones, creencias y dogmas me costaría una entrada tan larga que no la leería nadie. Contar mis experiencias buenas y malas con el clero tampoco son el tema de hoy, tal vez otro día. Colocar en una balanza tantas cosas... Once han sido,que se sepa de momento, los caballos que éste año han perecido en una manifestación "religiosa", dos más que el año pasado. Han muerto de hambre y de sed, mientras sus últimos momentos de vida fueron para cargar sobre sus lomos a "fervientes romeros", para llevarlos ante el objeto de su adoración, para dejarles a los pies de su fe, para que no se cansaran hasta llegar a pedirle a su Virgen salud, amor, y un sinfin de parabienes. El ser vivo que usaron como mero transporte, no tenía el puto derecho a beber ni un sorbo de calenturienta agua. Solo sirvió para cargar a una bestia sobre su hermoso lomo hasta reventar sus riñones, su higado y su corazón, y caer desplomado al suelo sin vida...da igual, ya había cumplido con su cometido, al fin y al cabo es solo un animal,y está para lo que está. El que alguien que golpea su pecho y alza su voz en nombre de un Dios, sea cual sea, se llame como se llame, esté donde esté...rogando por su bienestar y el de los suyos, sea incapaz de mirar hacia otro lado porque está ciego de egoismo...me parece de todas, todas aborrecible. Qué Dios margina? Qué Dios elige entre vidas? Qué Dios permite la muerte gratuíta? Qué Dios enfrenta a hermanos contra hermanos? Qué Dios crea vida para luego mutilarla gratuitamente? El Dios que yo quiero tal vez esté dormido. Pero no entiendo porqué no despierta...son demasiados los gritos desde este lado, tal vez quedó sordo, tal vez ya no quiere oirnos... Si realmente creemos en algo para agradecerle, para culparle, para consolarnos, para rebelarnos ante El...quede constancia hoy de mi rebeldía, porque jamás, jamás entenderé porque si hay algo cierto en nuestra Creación, porqué nos creó tan hijos de puta. Pienso que quizás le salió mal el invento, y que trás ver en lo que nos habiamos convertido, salió pitando hacia otra galaxia, hacia otro universo...y aquí nos dejó, que nos dieran por donde amarga el pepino y que nos las compusieramos solos. Que me da igual la fe, que cada uno tenga la que quiera tener. Que no juzgo a nadie por sus creencias, pero sí por las consecuencias. Dejar morir a un animal de hambre y de sed es de hijo de puta, de mal nacido y a ese le queda grande cualquier beneplácito que pida, se lo pida a quien se lo pida. Que quien tenga competencia para perdonar, perdone. Yo soy absolutamente incompetente.

Quiero.

Que todo acabe y que todo empiece. Que la luz se apague y otra nueva se encienda. Correr sin camino, volar sin destino... Partirme en dos con abrazos. Quemar mi piel con labios. Mirar a los ojos, contagiarme de vida. Salir temprano...no volver. Sentir aire, lluvia...oler lo nuevo que nace, lo que empuja mi espalda para que no caiga. Tocarte. Olerte. Sentirte. Saber que en realidad estás ahí. Saber que hay algo de ti que es mio y va a serlo siempre. Quiero hacer tanto. Quiero volver a equivocarme. A caer. A levantarme. Quiero mis pies cansados. Quiero mis manos sucias. Quiero mi boca sedienta...de no parar, de no descansar... Que nada te dañe. Verte reir. Quiero... Quiero no tener nada porque lo di todo. Quiero que en mi pobreza tu seas mi fortuna. En mi soledad mi compañía. Quiero que tu silencio sea mi música. Que seas mi alimento. Quiero tanto... Quiero pedirte...que llenes mis huecos. Quiero tenerte dentro de mis manos, alrededor de mi cabeza, corriendo en mis venas... Quiero que me grites cuando me vuelvo sorda. Quiero que me empujes cuando mis piernas no caminan. Quiero que me provoques cuando entierro mi espada. Quiero ser tú cuando no quiero ser yo... Estar allí. Volver aquí. Quiero lo que no tengo, porque ahora tengo lo que no quiero. Llegar a saber quien soy. Hasta donde puedo llegar. Que puedo hacer. Partir cadenas, soltar amarras...ser libre. No hacer nada por siempre. No amar por siempre. No odiar por siempre. No dormir por siempre... Quiero saber donde estás cuando no estás. Quiero no necesitar más lo que necesito ahora. Simplemente...quiero.