Para el que lucha activamente contra las injusticias.
Para el que se sacrifica por los demás.
Para el que una marca significa esclavitud.
Para el que comparte y no solo da lo que le sobra.
Para el que deja el sofá para correr.
Para el que parte su manta en dos.
Para el que siente el dolor ajeno como propio.
Para el que no insulta.
Para el que respeta.
Para el que considera.
Para el que ama realmente.
Para el que no mira su ombligo.
Para el que el mundo va más allá de los suyos.
Para el que lo suyo es lo de todos.
Para el que no se considera indispensable.
Para el que es indispensable para el resto.
Para el que piensa, y tal como piensa...actua.
Para el que consuela, ánima, apoya, acompaña.
Para el que su vida no tiene sentido si no es por los demás.
Para el que siente, ama, pérdona, comprende, ayuda.
Para el que lucha por los que no tienen voz.
Para el que es uno más y no uno sólo.
Para el que llena sus manos. Para el que las vacía.
Para el que vive su vida y no la ajena.
Para el que tiene en que pensar, por que pelear, por que amar...
Para el que no se ciñe a lo definido por otros y si a lo sentido por uno.
Para todo animal, humano o no, que posea alma. Y sienta. Y sufra. Y ame. Y viva.
Y todo lo contrario...para el egoísta, el burgués, el señorito, el que mira por encima del hombro, el que desprecia, el que no comparte ni comprende, el que no ve más allá de sus narices, el que insulta, el que ignora, el que teme, el que amenaza, el que se para, el que no avanza, el cobarde...
Y para el que a veces simplemente no entiende lo que ocurre a su alrededor?
ResponderEliminarPara ese, Raúl, para ese... una mano que le acompañe, un abrazo que le reconforte y una voz que le explique. Tras eso...libertad para que decida.
ResponderEliminarMuchas gracias por leerme y por tu comentario.
Un saludo.